A1 Pescaditos Dorados

$179,000.00

Materiales: Plata, baño en oro de 24 kilates, esmeralda colombiana
Incluye dije o prendedor
#HechoaMano
Técnica: Filigrana 

 

“Consiguió imponer en Macondo el ambiente de Paz Rural con que soñaba el coronel Aureliano Buendía para morirse de viejo fabricando Pescaditos de Oro” Cien años de soledad

El oro de El Dorado, las verdes esmeraldas, las mariposas amarillas y el realismo mágico fusionados a través de fina técnica filigrana por orfebres de la Colombia rural, ubicados en regiones afectadas por el conflicto.

Categoría:
Materiales: Plata, baño en oro de 24 kilates, esmeralda colombiana
Incluye dije o prendedor
#HechoaMano
Técnica: Filigrana

 

“Consiguió imponer en Macondo el ambiente de Paz Rural con que soñaba el coronel Aureliano Buendía para morirse de viejo fabricando Pescaditos de Oro” Cien años de soledad

 

Por Emilio, Juan Martín, Simón, Alejandra y las generaciones a las que abriremos una segunda oportunidad sobre la tierra.

“Todos eran artesanos hábiles, hombres de su casa, gente de paz” Cien años de soledad

Al evocar la historia de “Cien años de soledad” observamos que el coronel Aureliano Buendía ante todo era un experto orfebre apreciado más allá de las fronteras de Macondo por su excepcional trabajo, sin embargo su rol más evidente ha sido el de militar y de ello tenemos conciencia desde la primera línea de la novela al hallarse “frente al pelotón de fusilamiento”.

Ahora “cincuenta años” después, momento en que literalmente su vida se parte en dos queremos mostrarte su faceta de artesano, pues si en su recuerdo persistía “aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo”, también lo hacía el momento en que conoce el oro por ser dos episodios que se le presentan de forma simultánea en su niñez de la mano de su padre José Arcadio Buendía, quien no perseveró en la idea de construir las casas del caluroso poblado con refrescantes bloques de hielo, por dedicarse a la educación de sus hijos muy especialmente a la del pequeño Aureliano que desde sus primeros años mostró una intuición alquímica.

Esta es la historia que queremos empezar a escribir en Colombia, así que desde ahora puedes ayudarnos a que los “Pescaditos de Oro”, durante tantos años de conflicto invisibilizados para el mundo, vuelvan a ser aquellas bellas joyas artesanales a través de las cuales el coronel Aureliano Buendía y toda su estirpe transformarán su vida y la de los habitantes de Macondo.

“Macondo estaba transformado, la aldea se convirtió muy pronto en un pueblo activo, con tiendas y talleres de artesanía” Cien años de soledad

 

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